¡Buf! Casi 2 meses sin escribir :0 Temas varios, y la casa nueva me tienen secuestrada!!! Por fin hemos terminado la reforma, ahora queda amueblarla, el traslado… Así que supongo que mis posts seguirán siendo esporádicos 😉

Nicolás lleva unos meses con su moto emocionado, y ya es todo un experto, así que me planteé que llegó el momento de pasarle a una bici, y con ello la pregunta existencial: ¿Triciclo para que aprenda a pedalear o bici sin pedales, para que aprenda el equilibrio? (para bici con ruedines aún es muy pequeño y me pasa como con los manguitos para nadar, no me gustan los ‘apoyos externos‘ de los que luego se tiene que deshacer…)
Lo de la bici sin pedales es una historia, porque probamos la de su prima y aunque él no la quería soltar y le puso mucho empeño, como apenas tocaba el suelo sentado en el sillín, se caía todo el rato. Creemos que aún no la puede llevar porque no puede flexionar las rodillas, lo que es necesario para impulsarse.
Voy a probarle la Early Rider Lite, a ver que tal le va este finde en la Casa de Las Bicis: http://www.casadebicis.com , c/La Ruda, 8 (no es por darles publicidad, es que no he visto muchas tiendas en Madrid que la vendan)
Me ha parecido genial la experiencia de un papá bicicletero que nos cuenta lo que hay que tener en cuenta para enseñar a montar en bici, con su permiso lo voy a transcribir… Es un poco largo pero muuuy instructivo, así que os animo a que lo leais:
Para enseñar a montar en bici a un peque:
Ante todo, que nadie se asuste, ya que si lo hacemos medianamente bien nuestra espalda ni lo notará.
Hoy día está muy estandarizado las bicis sin pedales para los peques: motos con rueda ancha, ciclos sin pedales de 12 pulgadas (medida de la rueda) y demás artilugios.
A través de estas bicicletas sin pedales el niño aprende completamente solo el equilibrio. Para esto sirven la mayoría de ellas.
Y aquí viene la primera dificultad: muy pocas tienen una geometría no solo cómoda sino eficiente para el equilibrio. Una bici es eficiente para el equilibrio cuando el niño tiene una postura cómoda (no forzada) y segura encima de ella. Esto implica llevar al niño a las tiendas y probárselas (que además le encanta).
Si compramos una bici no apropiada, el niño perfectamente puede aprender, pero va a tardar algo más, con lo que se puede desmotivar y abandonarla.
Características de una bici sin pedales adecuada:
– posición cómoda: distancia manillar – sillin adecuada (espalda mas o menos recta y brazos medianamente flexionados (que cuando gire el manillar no le falte brazo), distancia entre eje de ruedas adecuada (muy larga será más estable pero difícil de maniobrar, muy corta será muy nerviosa o difícil de estabilizar).
– regulación altura sillín
– dirección con posibilidad de bloqueo o libre.
– sin frenos (usa los pies)
– ligera (la debe poder manejar el niño en casi todas las situaciones).
– anchura del eje trasero (rueda trasera) mínima.
– asiento cómodo.
– por supuesto, siempre con casco.
– cubiertas (neumáticos) con balón grande (como las bicicletas de montaña y no como las de carretera), pero sin tacos.
Una vez tenemos la bici, conviene que el niño llegue al suelo perfectamente con los dos pies y rodillas ligeramente flexionadas. Dar seguridad al niño es lo más importante.
Al principio recomiendo tener la dirección bloqueada, es decir el manillar lo puede girar unos 45º a cada lado. Más adelante cuando controle perfectamente el radio de giro de la bicicleta y mantenga el equilibrio se la podremos liberar (90º a cada lado) pero advirtiéndoselo antes y haciendo algunos ejercicios (zig-zag) a muy poca velocidad.
Cuando el niño domine el equilibrio y agote el crecimiento de la bici (se le quede pequeña) habrá que ir pensando en dar el paso a una bici más grande y ya con pedales.
Antes del paso hay que tener en cuenta dos aspectos:
– el niño no sabe dar pedales
– el niño no sabe frenar con frenos de mano
Podríamos poner un tercer aspecto, el niño no sabe iniciar la marcha, pero como apenas es un problema, lo dejo como aspecto a saber.
Para aprender a dar pedales sirve cualquier aparato que los tenga y que pueda utilizar el niño. Yo use un triciclo que alguien tiro a la basura. Con el aprendió a dar pedales.
Para enseñarle a frenar lo podemos hacer directamente sobre la bici en cuestión proponiéndole ejercicios de frenada en los que no utilice los pies.
La elección de esta bicicleta con pedales tiene los mismos criterios que la anterior: debe ser cómoda y regulable (en este caso es más fácil ya que manillares y sillines suelen serlo). Un dato importante, es mejor que nos quedemos cortos (que le quede algo pequeña la bici) a que nos pasemos y le quede grande. Lo más importante es dar seguridad y para ello debe llegar con los dos pies al suelo perfectamente.
En las primeras salidas que hagamos con la bici nueva (o reciclada) el niño tendrá que coordinar muchos elementos por lo que necesitará que le ayudemos en la salida y luego debemos ir cerca para indicarle sobre todo el uso de frenos de mano.
Mi experiencia: la bici sin pedales que compré fue la earlyrider lite 12
http://www.earlyrider.com/product/early-rider-original-lite/

Es algo cara pero yo estoy encantado. Eso sí, como es de madera la protegí con vinilo que venden en las tiendas de bici para proteger los cuadros de las bicis.
También le enseñe a aparcar la bici y no tirarla como hacen muchos niños.
Con un año y 9 meses tenía perfectamente aprendido el equilibrio. Con dos años y 7 meses compré de segunda mano la bici de pedales del decatlon que tiene buena posición y con dos salidas controlaba el equilibrio y el pedaleo y con algo más de tiempo los frenos. Los arranques de cero le han costado algo más pero lo acaba haciendo antes si le ayudamos menos.
La bici que compré (por supuesto sin ruedines) es
http://www.decathlon.es/bicicleta-nino-14-elephan-id_8167092.html

NOTA: la altura de mi hijo para su edad no es la normal. Él es algo más alto por lo que estás bicis pueden servir para un niño de más edad de altura normal.
Y para terminar dos cosas:
– la seguridad por las aceras es primordial. Cuando va con la bici sin pedales, las primeras salidas yo iba a pie o corriendo para asegurarme de que paraba en los cruces con calles. Cuando esto estuvo conseguido yo le acompañaba en bici siempre detrás de él (para recordarle que mire para adelante y no tanto a la rueda, que las farolas no se mueven). Debemos enseñar al niño con bici de pedales a parar ante cada paso de cebra, y cruzar andando no montado. Es la normativa y un punto extra de seguridad.
– para evitar que los niños se ensucien con el aceite, existe en tiendas de bici especializadas un «aceite» de cera que lubrica y no mancha.